La Unión Europea volvió a preocuparse por las normas que regulan el crédito hipotecario en los Estados miembros tras la crisis americana de los créditos subprime (tambien llamados hipotecas de alto riesgo, los subprime son créditos de caracter hipotecario, en general, con tipos de interés elevados y variables otorgados a usuarios con escasa solvencia).